El Pleno del Congreso aprobó por unanimidad la Ley Antibullying, que establece que todas las instituciones educativas deberán contar con al menos un psicólogo para la prevención y tratamiento de casos de violencia escolar.
La norma busca promover de esta forma la convivencia sin violencia ni acoso en las comunidades educativas y busca dar al Ministerio de Educación una herramienta legal para prevenir y combatir el maltrato entre estudiantes.
La medida dispone también la creación de una Junta para la Convivencia Escolar Pacífica integrada por autoridades educativas, la asociación de padres de familia, representantes de los docentes y auxiliares de los centros educativos.
Asimismo, la ley contempla que todos los colegios dispongan de un Libro de Registro de Incidencias, donde se ingresarán todos los casos de ‘bullying’ que se presenten, el mismo que deberá incluir las acciones adoptadas y las sanciones impuestas en cada caso.
El término inglés “bullying” hace referencia a la violencia física o verbal entre pares en ambientes escolares, así como todo comportamiento agresivo intencional, repetido en el tiempo con un desequilibrio de poder o de fuerzas.
En una sociedad llena de fisuras como la peruana, el "bullying" ha coexistido con la discriminación en las escuelas y permanece indeleble en la memoria colectiva.
La presencia del “bullying” no es ajena a nuestra literatura, como era de esperarse. Fue advertida por la atenta mirada del gran poeta de Santiago de Chuco. En su cuento “Paco Yunque”, César Vallejo retrató al agresor (Humberto Grieve) y a la víctima (Paco Yunque) en un escenario escolar con cómplices testigos enmudecidos por el código del silencio.
Los docentes y padres de familia son los principales responsables en dirigir el buen desenvolvimiento de sus alumnos - hjos escolares, desde la educación familiar, educación inicial, educación primaria y secundaria. Con el ejemplo del respeto, de la solidaridad, de la honestidad y de la superación personal y colectiva. Porque en las calles, medios de comunicación, hogares e instituciones aún periste la violencia, el daño a la integridad personal, el abuso, violación, robo, etc. Entonces debemos crear todos los días estrategias y armas para enfrentar dichos males que en el presente y futuro, se reflejan en las aulas escolares.
Debemos evitar que dicha volencia escolar se vuelva como norma de grupo, como un hábito de algunos que se creen con mayor fuerza, poder, dominio y brutlidad con respecto a los demàs. En los currículos se debe incorporar contenidos y actividades para educar, reforzar y transformar a nuestros alumnos.
Es cierto, que existen muchas experiencias positivas, talleres grupales, salidas de campo, excursiones, teatro escolar, coros eductivos, deporte inter instituciones, cine escolar, etc. Es decir, apoyemos en sacar adelante todos los proyectos que permitan a los alumnos integrarse, relacionarse con sus iguales de su colegio y con otros colegio, de trabajar en equipo y valorar el aporte de cada uno, de fomentar la hermandad, solidaridad, de sacrificio por el logro de objetivos comunes, desarrollo y superación de la persona, escuela y comunidad.
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